La misericordia es por encima de la Justicia.
Cuando Kṛṣṇa se había montado en su cuadriga para regresar a Dwaraka, Uttara llegó corriendo en busca de su protección. Cayendo ante las ruedas de Su carro, Uttara suplico por su vida y por la vida de su hijo, dijo:
पाहि पाहि महायोगिन्देवदेव जगत्पते
नान्यं त्वदभयं पश्ये यत्र मृत्युः परस्परम्
Shrimad Bhagavatam (1.8.9)
pahi pahi maha-yogin deva-deva jagat-pate
nanyam tvad abhayam pasye atra mrityuh
parasparam
Y mientras hablaba un misil de gran poder, brillante como el cielo, cayía desde los cielos. La poderosa arma guiada por el mantra se aproximaba al lugar en donde estaba arrodillada Uttara. Pero Kṛṣṇa había escuchado la oración de Uttara. Y al ver que el misil volaba directo hacia ella, la protegió con sus poderes yóguicos. Y con este milagro divino Kṛṣṇa hizo que su vientre estuviera protegido del ataque hacia su hijo nonato, Parikṣit, el futuro regente de India.
Mientras tanto el poderoso Arjuna junto con sus hermanos cabalgó firmemente hacia el sitio en el que se escondía Aśvatthāmā. Quien fue capturado. Los enojados hijos de Paṇḍu lo atraparon y lo arrastraron tal cual bestia fuera del bosque. Lo tomaron, le ataron de pies y manos y regresaron ante su esposa, Draupadī la de sangre ardiente quien estaba en duelo por el asesinato de su hijos.
El Perdón de Draupadī
द्रौपदी कृप
"Por favor, no seamos nosotros la causa de futuras desgracias, ya que somos justos." Dijo Draupadī. "Y ya que la misericordia es superior a la justicia, muestren misericordia hacia él. Después de todo este derramamiento de sangre, empecemos de nuevo. Ahora al fin tendremos paz. No empecemos un reino de paz con un acto de venganza. Que la esposa de Droṇa no llore igual que yo. Y finalmente, apeló a Kṛiṣhṇa, "O Kṛiṣhṇa, dale justicia o muéstrale tu misericordia según te plazca.”