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Friday, November 11, 2016

Conocimiento, Intelecto y Fe

Conocimiento, Intelecto y Fe 
Argumentos para la existencia de Dios
He esbozado brevemente lo que se considera los argumentos clásicos acerca de la existencia de Dios. Al final, por supuesto, la existencia de Dios no depende de nuestra capacidad de observar los argumentos. Kierkergaard sentía que mientras que la razón y el intelecto intentaban probar la existencia de Dios, el propio Dios es absolutamente diferente y más allá por completo de nuestra comprensión y por encima de nuestro lenguaje que lo describe. Por lo tanto, el hace un llamado para lo que se conoce como “sato de fe”. De acuerdo a Kierkergaar, en última instancia, no hay una justificación racional para creer en la vida eterna y la existencia de Dios. Uno no puede “corroborar” a Dios. Hay una brecha entre los límites del intelecto y la realidad infinita. Únicamente un salto de fe puede superar la brecha entre la razón y la divinidad. La fe ha de ser eso solamente, y en ese sentido es “irracional”. El abrazar lo irracional es por supuesto riesgoso. Hemos escuchado el aforismo, “sin riesgo no hay ganancia”. El pensador matemático francés Blaise Pascal asumió el problema del riesgo involucrado en su famosa apuesta. La fe parece irracional. Pero, ¿cuál es la consecuencia de una vida sin fe? La apuesta de Pascal hace precisamente esta pregunta. Pascal nos pide imaginar que la propia vida es una apuesta.
Dios existe o no. Si Dios existe y seguimos una vida informada basada en la fe nuestra recompensa será eterna. Si dios existe y nosotros no nos levantamos perderemos nuestra alma inmortal. Si dios no existe y vivimos una vida de fe no esteremos mejor.
Si Dios no existe y vivimos una vida sin fe, nada se gana y nada se pierde. Imaginen que son unos jugadores. Colocas tu vida para jugarla al azar. Si apuestas por la existencia de Dios en un acto de fe ganaras la vida eterna. Algo de riesgo, pero ganas todo.
Si apuestas contra Dios y él existe, arriesgas tu vida, y pierdes todo: Infierno eterno. Si apuestas a la existencia de Dios y él no existe, no pierdes nada. Algo de riesgo, ganancia cero.
Apostar contra Dios, descubrir que él no existe, no pierdes nada. ¿Cómo se apuesta? Pascal se rehúsa a que abandones la apuesta. Tienes que apostar. Y la apuesta es tu vida. El argumento de Pascal no es filosófico, ni verdaderamente teológico. Es un amplio desafía a los pensadores quienes viven una vida ética, y no hay escapatoria  a la apuesta. ¿Cómo apuestas tú?
Sin riesgo no hay ganancia: Dios no existe, no tenemos fe. Una posición neutral. Apuesta tu vida. No ganas nada. Dios no existe, pero tenemos fe. Dios no existe, pero tenemos fe. Todo riesgo: dedicamos nuestras vidas y vivimos éticamente, sin ganar nada. Nuestra recompensa es vivir bien. Todo riesgo, no hay pérdida. Si Dios existe y rechazamos la fe, ganamos el infierno eterno. Sin riesgo, se pierde todo. Pero si Dios existe y tenemos fe, ganamos todo. Todo riesgo, todo ganancia.
La apuesta de Pascal, tal como hemos mencionado fuera de una posición filosófica rigurosa. Es un reto: No puedes retirarte de la apuesta. Incluso si no quieres, estás apostando tu vida. La inacción y pasividad no serán posibles. La falta de fe es la apuesta. La fe es la apuesta. No puedes no apostar.
Fe Vs Conocimiento
Hay cosas que la ciencia física por sí misma no puede explicar. Hay otras formas de entendimiento necesario para entrar en contacto con realidades más elevadas. Son necesarias otras formas de conocimiento. El fracaso del reduccionismo y la racionalidad demandan alternativas al materialismo.
Los límites del escepticismo: Hume y Nietzsche
Humes falla cuando se rehúsa a aplicar su brillante escepticismo a su propio materialismo. Nietzsche tiene más valentía. Lleva el escepticismo a un nivel más profundo al aplicarlo a todo. Como solvente poderoso, su intelectualismo ácido disuelve incluso el materialismo, esto es, el pensamiento racional y el argumento de un filósofo justifica sus propias ideas preconcebidas. Nietzsche:
“Como lo explica un filósofo histórico, existe, estrictamente considerado, no existe un acto ni una observación completamente desinteresados; ambos son simples sublimaciones.”
Nietzsche afirma que nuestra visión mundana determina nuestra filosofía: mi visión del mundo determina la mía. Toda nuestra lógica brillante e intelectualismo sólo sirve para probar los argumentos de aquello que ya creemos. Todos ven el mundo de forma distinta y su filosofía sólo justifica la visión del mundo que ya tienen. Todos piensan del mundo con referencia a la propia experiencia egoísta. En Sánscrito, esto es llamado atmavan manyate jagat. “tal como uno es, así concibe el mundo”.
Atmavan Manyate jagat: Todos ven el mundo de acuerdo a su propia posición. Para el Marx empobrecido y en paro toda verdad es una verdad económica; el mundo de Marx se basa en el dinero, la explotación y la lucha de clases. Para Freud la realidad es el mundo interno. Pero la posición de Freud en el mundo se basa en el temor y el deseo. Miedo a la muerte, el deseo sexual y el deseo reprimido satisfecho que se manifiestan en nuestros sueños. Darwin veía al mundo en términos de “supervivencia del más apto”. Todo dar y recibir del mundo conocido es un ejemplo de selección natural que impulsa la inexorable fuerza de la evolución. Para un martillo todo problema parece ser un clavo. El escepticismo de Hume era inmaduro, porque consideraba que el agnosticismo de la ciencia superior a la fe. El escepticismo de Nietzsche cuestionaba incluso al materialismo científico, al reconocer que éste también es un interés egoísta.
La ciencia es una fe metafísica: Nietzsche
En su Ciencia Jovial, el gran escéptico Nietzsche dice tanto cuando señala que la ciencia también descansa en la fe: “sigue siendo una fe metafísica sobre la cual descansa nuestra fe en la ciencia…”
En la Ciencia Jovial Nietzsche critica las deficiencias de la ciencia moderna y señala los límites del paradigma materialista, expresando un escepticismo saludable acerca de la “supervivencia del más apto” darwiniano, como un ejemplo de la dialéctica hegeliana. La idea del desarrollo constante hacia un progreso humano definido no se ajusta a los hechos, de acuerdo a Nietzsche. Él ve el movimiento del mundo menos ordenado que Darwin. Evita rechazar el paradigma científico, pero expresa escepticismo hacia su ética despiadada y su uso brutal. Él halla que la ciencia es útil en definir el movimiento y la velocidad de las partículas, pero no puede explicar el comportamiento humano.
Incluso el escepticismo de Nietzsche es defectuoso
Los escépticos, por supuesto descartan secciones enteras de Nietzsche como carentes de rigor. Pero donde Hume destruiría la fe con sus argumentos, Nietzsche propone su escepticismo incluso hacia los científicos de bata blanca quienes conservarían en el futuro sus secretos sagrados guardados en sus torres de marfil. El escepticismo es caníbal: al final devora el intelecto que busca la verdad a través de la negación. Por negar toda la influencia sobrenatural llegamos a negar la consciencia, el pensamiento, la mente, el alma e incluso nuestra propia realidad.
La Fe se hall más allá del Escepticismo.
Pero una visión completa de la realidad es mucho más sutil que nuestra capacidad de razonar y analizar. Sólo una fe cultivada delicadamente nos da la visión para ver la realidad más elevada. El escepticismo es útil en eliminar la superstición. Pero en su análisis final, el escepticismo es inútil en cubrir para descubrir la realidad del alma.
Fe e Intelecto
Cuando me perturbaron estas preguntas, consulté a un santo de gran fe, mi mentor espiritual, Śrīdhara Mahārāja, en Nabadwip-dhāma, Bengal Occidental. Él explicó: “Verás que el exceso de discusión puede oponerse a la fe. Al final la realidad más elevada es adhoksaja trascendental. Krishna es adhoksaja y sólo se aproxima a través de la fe. No se aproxima a través del intelecto, la razón, o los argumentos. Los argumentos son necesarios para ayudar a la gente intelectual hasta cierto punto. Pero pretender que todo quepa en nuestro puño es inconveniente para un devoto”.
Las enseñanzas de la fe de Śrīdhara Mahārāja
Śrīdhara Mahārāja enseñó que tanto como sea posible debemos intentar entender a Dios y explicarlo a otros de acuerdo a nuestra fe. Para esta tarea es valioso tener un respaldo filosófico y teológico. Pero al final, Dios, Kṛṣṇa, es trascendental. Esto puede entenderse sólo a través de la fe, y hasta cierto punto debemos llegar a la conclusión de que para Dios cualquier cosa es posible. Puede que tengamos algo de entendimiento intelectual, pero al mismo tiempo habremos de mantener en el interior del subconsciente que todo está respaldado por la dulce voluntad de Kṛṣṇa y que nada puede ser medido. El propio Kṛṣṇa explica en el Bhagavad-Gita: maya tatam idam sar­vam(BG: 9.4) Kṛṣṇa le dice a Arjuna, “Si puedes halla mi posición con tu intelecto, Oh Arjuna, pero recuerda: estoy en todas partes; y en ningún lado. Todo está en Mí; y nada está en Mí.”
Analizando la Realidad Trascendental
Antes de analizar la realidad trascendental, debemos mantener en la mente siempre esta advertencia. En última instancia, debemos pensar: “Él es desconocido e incognoscible, y todo está en Sus manos. Está en todas partes; y en ningún lado. Todo está en Él y nada está en Él. Él es achintya, por encima y más lla del pensamiento, inconcebible.” Superior a las visiones de Rāmanuja de adhokṣaja están las visiones de Caitanya Mahāprabhu acerca de la filosofía Vedānta. Su versión es llamada achintya-bhedābheda: De acuerdo a este entendimiento, Bhagavān Śrī Kṛṣṇa, el propio Dios, es absoluto. No se halla al alcance de nadie. Todo es controlado a través de Su dulce voluntad. Él es trascendental.  Puede hacer cualquier cosa. Es inconcebible. Esta es la definición exacta de Dios. Entonces el intelectualismo no puede penetrarse ahí. Se halla por encima de nuestro escepticismo. Śrīdhara Mahārāja pensó que el intelectualismo no penetra lo trascendental. “Nuestro cerebro ha sido advertido de este modo. Puede que intentemos discutir  Kṛṣṇa, pero demasiado intelectualismo obstruirá nuestra fe.” Śrīdhara Mahārāja explica que Dios no es un tema académico, sino la realidad más elevada.
El argumento filosófico puede reforzar la fe…
Śrīdhara Mahārāja pensó que nuestra fe puede ser reforzada por la comprensión intelectual, especialmente en el nivel intermedio. En este nivel, llamado madhyam-adhikari, puede haber tanto entendimiento como algún remanente de duda. La investigación filosófica y el argumento teológico pueden usarse, incluso ser necesarios para ir hacia lo más profundo.
Y sin embargo, en su gran tratado sobre la teología bhakti, Kṛṣṇa-saṁhita, Bhaktivinod Thakur señala que el nivel intermedio de la realización espiritual es un nivel peligroso. Esta etapa es llamada madhyama-adhikarri. Ya que mientras uno se halla en una etapa de desarrollo de la fe, algún intelectualismo será de ayuda, especialmente para argumentar con otros o para representar a otros la fe, al compartir nuestras creencias. Pero el intelectualismo no es absoluto.
Pero la filosofía puede ser peligrosa
El intelectualismo y la filosofía son peligrosos en el sentido que las funciones de la lógica basadas en la negación. Antes de saber qué es algo, he de entender primero lo que no es. Entonces, la inteligencia dice “esto no es, ni esto”, para llegar a la verdad. Este intelectualismo y argumento lógico trae cierta satisfacción a través de la racionalización. Es la clase de satisfacción que obtenemos al leer una buena novela de misterio, resolviendo un crucigrama, o trabajando en la respuesta de un acertijo. Pero el análisis avanza a través de la duda, y la duda puede destruir la fe.
Más allá de los enigmas
El carácter trascendental de la divinidad y la consciencia, de Kṛṣṇa y del amor divino, está por encima de los acertijos. Es achintya, impensable, trascendental, inconcebible. Y en una etapa intermedia de amor especialmente, cuando la fe es aún frágil, uno ha de protegerse en contra del ego del placer intelectual y de las dudas que llegan con el análisis excesivo. El ego puede engañarnos. Es una forma de tentación. Pero el permitirnos el engaño con la satisfacción que viene del intelectualismo, Kṛṣṇa, Dios Supremo, puede también prohibirnos el realizar un teísmo perfecto a través del estado intermedio.
Propósitos cruzados
El intelectualismo y el escepticismo trabajan frecuentemente como propósitos cruzados de la práctica de bhakti o amor divino. En ocasiones un  principiante que llega a entrar en contacto con las almas realizadas más elevadas o uttama-adhikara puede claramente superar la etapa intermedia por completo sencillamente a través de la dedicación. Una lama afortunada tal no necesita argumentos o filosofía. Entonces la etapa intermedia es una zona peligrosa: demasiado conocimiento es algo peligroso. Y sin embargo el análisis filosófico y el entendimiento intelectual pueden reforzar la fe, por lo que el estudio y la autorreflexión a veces pueden ser necesarios para consolidar la fe.
Conclusiones de las Escrituras: Siddhānta
El propio Śrī Caitanya Mahāprabhu nos ha aconsejado que prestemos atención a las conclusiones de las escrituras: siddhanta baliya chitte nā kara alasaiha ha-ite lage sudridha manasa (Śrī Caitanya-charitamrta: CC Adi-lila, 2.117) “No seas perezoso en considerar las conclusiones filosóficas de la evidencia de las escrituras (Siddhānta) dentro de tu mente. El hacerlo firmemente puede ayudarte en tu fe y apego al corazón de Kṛṣṇa”. Entonces, ¿hay una prohibición de leer los libros? No. No se nos prohíbe leer. Las cosas que hay que recordar es que mientras que el intelecto puede darle soporte a la fe, la filosofía puede fortalecer la fe y facilitar su explicación a otros, solo la fe puede aproximarse al infinito.
Análisis y el Infinito
El análisis lógico, la racionalización, el intelecto no puede nunca aproximarse al infinito. Sólo la fe puede darnos acceso hacia la realidad más elevada del amor trascendental, el mundo de Bhāgavān Śrī Kṛṣṇa. En Sánscrito la fe es llamada śrāddha. Sólo śrāddha puede darnos acceso. Sólo la fe puede ayudarnos. ¿Cuánta fe necesitamos? Un poquito de fe puede mover montañas. Debemos darnos cuenta de que nada es imposible en el infinito.
Conclusiones y Evidencia de las Escrituras
El entendimiento intelectual es muy útil. Cuando discutimos las conclusiones dadas a través de la evidencia de las escrituras, cuando contemplamos el aspecto positivo, el tesoro del amor divino que ha sido dado a nosotros a través de nuestros gurus superiores, debemos intentar al máximo usar nuestra experiencia para entender el carácter completo. Pero el hacerlo en demasía perturbará nuestra fe. Con el exceso de estudio descubriremos discrepancias en las distintas versiones. Tal vez hallemos dificultades en las interpretaciones. Tal vez carezcamos del suficiente avance hermenéutico para ver el mundo de la misma forma que los Upaniṣads. Esto puede ser frustrante. Tal vez fallemos en entender la aplicación práctica de tanta filosofía. La posibilidad para ello está ahí. Entonces, incluso mientras estudiamos e intentamos capturar la verdad de las escrituras, en el fondo debemos recordar siempre, “Él es desconocido, y sus caminos son incognoscibles, No puedo meterlo en mi puño.
Solamente Fe
El intelecto no debe desatender la característica de Kṛṣṇa que únicamente la fe śrāddha puede enseñar. El intelecto no debe invadir la jurisdicción divina de Kṛṣṇa. Esto será peligroso para nuestra fe. La dulce voluntad no ha de ser empujada. La dulce voluntad de Kṛṣṇa, Su independencia, no ha de ser arrinconado. El intelecto no ha de ser indulgente de esa manera. Debemos tener en cuenta que  “Él lo es todo en todo. Él puede hacer y deshacer”. Este entendimiento nos ayudará. Śrāddha, la fe, ¡Nos ayudará! Y la fe se complementa con la buena instrucción del maestro divino. Nuestro guru puede ayudarnos con el entendimiento y la fe. En el Bhagavad-gita dice. tad viddhi pranip­atena pari­prashnena sevaya(Śrīmad Bhagavad-Gita: 4.34) Adquiere el conocimiento divino a través de la rendición, inquiere y sirve”.
El guru y la indagación sincera
Pariprashna, la indagación sincera se permite. Las preguntas que ayudan a la fue podrán ayudarnos.  Así que podemos plantear esta clase de preguntas a nuestro guru, Debemos buscar conclusiones que ayuden a nuestra fe, que corroboren nuestra fe. Y por el otro lado, las preguntas impertinentes son inútiles. El guru no es una enciclopedia. No debemos perturbarle con preguntas de geografía o actividades triviales. He visto devotos inoportunos fastidiar a  Śrīdhara Mahārāja con preguntas acerca de la distancia entre la tierra y el sol, la órbita de la luna y acerca de si Jesucristo peregrinó por la India. Pero el consejo del Guru está destinado a alentar la fe y guiar al discípulo en su viaje hacia la rendición. Estos son los principios o las verdades axiomáticas que deberían iniciar nuestra investigación.
Precaución en contra del exceso de darle vueltas en la cabeza
Śrīdhara Mahārāja dice, “Con esa precaución debemos intentar conocer cualquiera y todas las cosas, pero debemos entender que somos limitados y que vamos a abordar lo ilimitado. Esta idea nunca debe de olvidarse en ninguna etapa de nuestra discusión.”


Monday, November 7, 2016

Knowledge, Intellect, and Faith...

Arguments for God’s Existence


I have briefly outlined what are considered to be classical arguments for the existence of God. In the end, of course, God's existence does not depend on our capacity to see the point of an argument.  Kierkegaard felt that while reason and intellect attempt to prove God’s existence, God Himself is absolutely different and totally beyond our comprehension and beyond our language to describe. Hence, he called for what is known as a “leap of faith.” According to Kierkegaard there is ultimately no rational justification for the belief in eternal life and God's existence. One cannot “prove” God. There is a gap between the limits of intellect and infinite reality. Only a leap of faith can surmount the gap between reason and divinity.  Faith must be just that, and in that sense is “irrational.”   The embrace of the irrational is of course risky. We have heard the aphorism, “no risk, no gain.”  French Mathematician and thinker Blaise Pascal took on the problem of the risk involved in faith in his famous wager. Faith appears to be irrational. But what is the consequence of a life without faith? Pascal’s wager asks just this question. Pascal asks us to imagine that life itself is a wager.






Either God exists or he doesn’t. If God exists and we follow a life informed with faith our reward is eternal. If God exists and we don’t we stand to lose our immortal souls. If God doesn’t exist and we live a life of faith we are no worse off.  



If God doesn’t exist and we life a faithless life, then there is nothing gained and nothing lost. Imagine that you are a gambler. You step up to the table to stake your life on the odds. If you bet on God’s existence and act in faith you win eternal life. Some risk, but all gain.  



If you bet against God and he exists, you risk your life, and there is all loss: Eternal hell.
If you bet on God’s existence and he doesn’t exist, you lose nothing: Some risk, no gain.
Bet against God, discover he doesn’t exist, you lose nothing, you gain nothing. How do you bet? Pascal refuses to let you out of the wager.  You must bet. And the stake is your life. Pascal’s argument is not philosophical, nor truly theological. It is a broad challenge to thinkers who would live an ethical life, and there is no escaping the wager.   How do you bet?


No risk. No gain: God doesn’t exist, we have no faith. A neutral position. Bet your life. Get nothing. God doesn’t exist, but we have faith. All risk: we dedicate our lives and live ethically, but gain nothing. Our reward is living well. All risk, no gain. If God exists and we reject faith, we gain eternal hell. No risk, all lost. But if God exists and we have faith, we gain everything. All risk, all gain.


Pascal’s Wager as we have said is not a rigorous philosophical position. It is a challenge; you cannot back out of the wager. Even if you don’t want to, you are betting your life. Inaction and passivity won’t do. Lack of faith is a bet. Faith is a bet. You can’t not bet.


Faith vs. Knowledge

There are things that physical science alone cannot account for. There are other forms of understanding necessary to get in touch with higher realities. Other ways of knowing are called for. The failure of reductionism and rationality demand alternatives to materialism.

Skeptic David Hume
Nietzsche the greatest skeptic

 

Limits of Skepticism: Hume and Nietzsche

Hume fails when he refuses to apply his brilliant skepticism to his own materialism. Nietzsche has more courage. He takes skepticism to a deeper level by applying it to everything. Like a powerful solvent, his acid intellectualism dissolves even materialism. Nietzsche does us a great favor, pointing out out that all philosophy is self-interested, that is, the rational thinking and argument of a philosopher justifies his own preconceived ideas. Nietzsche:

“As historical philosophy explains it, there exists, strictly considered, neither a selfless act nor a completely disinterested observation: both are merely sublimations.”

Nietzsche affirms that your worldview determines your philosophy; my worldview determines mine. All our brilliant logic and intellectualism only serves to provide arguments for what we already believe. Everyone sees the world differently and their philosophy only justifies the worldview they already have. Everyone thinks of the world with reference to one’s own selfish experience. In Sanskrit, this is called atmavan manyate jagat, “as one is, so he conceives the world.”  


Atmavan manyate jagat: Everyone sees the world according to his own position

For the poverty-stricken Marx all truth is economic truth; Marx’s world is based on money, exploitation and class struggle.  For Freud reality is the inner world. But Freud’s world is based on fear  and desire. Fear of death, desire for sex and the repressed wish fulfillment that plays out in our dreams. Darwin saw the world in terms of the “survival of the fittest.” Every give and take within the known world is an example of natural selection driving the inexorable force of evolution. For a hammer every problem looks like a nail.  Hume’s skepticism was immature, for it considered the agnosticism of science to be superior to faith. Nietzsche’s skepticism questions even scientific materialism, recognizing that it too is self-interested.

Science is a metaphysical faith: Nietzsche

In The Gay Science, the great skeptic Nietzsche says as much when he points out that science too rests on faith: “it is still a metaphysical faith upon which our faith in science rests…” In The Gay Science Nietzsche critiques the deficiencies of modern science and points out the limits of the materialistic paradigm, expressing a healthy skepticism of Darwinian “survival of the fittest” as an example of Hegelian dialectic.  The idea of constant development towards a human-defined “progress” doesn’t fit the facts, according to Nietzsche. He sees the movement of the world as less ordered than Darwin. He avoids rejecting the scientific paradigm, but expresses skepticism towards its heartless ethic and its brutal use. He finds that science is useful in defining the movement and velocity of particles, but cannot explain human behavior.

Even Nietzsche’s Skepticism is flawed

Skeptics, of course, dismiss whole sections of Nietzsche as lacking rigor. But where Hume would destroy faith with his arguments, Nietzsche aims his skepticism even at the white-coated scientists who would keep the sacred secrets of the future in their ivory towers.  Skepticism is cannibalistic: ultimately it devours the intellect that seeks truth through negation. By negating all supernatural influence we come to negate consciousness, thinking, mind, soul and even our own reality.

Beyond Skepticism is Faith

But a complete vision of reality is far subtler than our capacity for reasoning and analysis. Only a finely cultivated faith gives us the vision to see that higher reality. Skepticism is useful in eliminating superstition. But in the final analysis, skepticism is useless in uncovering the reality of the soul.

Faith and Intellect

When these questions troubled me, I consulted a saint of great faith, my spiritual mentor, Śrīdhara Mahārāja, in Nabadwip-dhāma, West Bengal.   He explained: "You see too much discussion may oppose faith. Ultimately the highest reality is adhoksaja transcendental. Krishna is adhoksaja and approachable only through faith. He is not approachable by intellect, reason, or argument. Argument is necessary to help intellectual people to a certain extent. But to want that everything must come within one’s fist is a drawback for a devotee.”

Śrīdhara Mahārāja’s Teaching on Faith

Śrīdhara Mahārāja taught that as much as possible we may try to understand God and explain Him to others according to our faith. For this task it is valuable to have some backing in philosophy and theology. But in the end, God, Krishna, is transcendental. This may be realized only through faith, and at some point we must come to the conclusion that for God anything is possible. We may have some intellectual understanding, but at the same time we must maintain within our subconscious that everything is backed by Krishna’s sweet will and that nothing can be measured. Krishna Himself explains this in the Bhagavad-gita: maya tatam idam sar­vam(BG: 9.4) Krishna tells Arjuna, “Find my position through your intellect if you can, O Arjuna, but remember: I am everywhere; I am nowhere. Everything is within Me; nothing is in Me”


Analysing Transcendental Reality

Before analyzing transcendental reality, we must always keep this warning in mind.
Ultimately we must think, “He is unknown and unknowable, and everything in His hand. He is everywhere; He is nowhere. Everything is in Him, and nothing is in Him. He is achintya, above and beyond thought, or inconceivable.“ Superior to Rāmanuja’s views on adhokṣaja  are Caitanya Mahaprabhu’s views on Vedantic philosophy. His version is called achintya-bhedābheda: According to this understanding, Bhagavan Śrī Kṛṣṇa, God Himself, is absolute. He is not within anyone’s grasp. Everything is controlled by His sweet will. He is transcendental. He can do anything. He is inconceivable. This is the very definition of God. So intellectualism cannot penetrate there. He is above our skepticism. Śrīdhara Mahārāja taught that intellectualism doesn’t penetrate the transcendental. “Our brain has been warned in this way. We may try to discuss Krishna, but too much intellectualism hampers our faith.” Śrīdhara Mahārāja explained that God is not an academic subject matter, but the highest reality.

Philosophical argument may bolster faith…

Śrīdhara Mahārāja taught that our faith may be bolstered by intellectual understanding, especially in an intermediate stage. In this stage, called  madhyam –adhikari, there may be both realization and some remaining doubt. Philosophical inquiry and theological argument may be useful, even necessary to help one go deeper. 



And yet, in his great treatise on bhakti theology,  Kṛṣṇa-saṁhita Bhaktivinod Thakur points out that the intermediate stage of devotional realization is a dangerous one.  This stage is called madhyama-adhikari. While one is still in the developing stage of faith, some intellectualism may be helpful, especially in arguing with others or representing faith to others, in sharing our faith. But intellectualism is not absolute.



But Philosophy can be dangerous

Intellectualism and philosophy are dangerous in the sense that logic functions on the basis of negation. To know what something is, I must first understand what it is not. So, the intelligence says “not this, not this,” to arrive at the truth. This intellectualism and logical argument brings a certain satisfaction through ratiocination. It’s the kind of satisfaction we get by reading a good mystery novel,  solving a crossword puzzle, or working out the answer to a riddle. But analysis moves forward through doubt, and doubt can destroy faith.

Beyond Riddles

The transcendental character of divinity and consciousness, of Krishna and divine love, is beyond riddles. It is achintya, unthinkable, transcendental, inconceivable. And in the intermediate stage of divine love especially, when faith is still fragile, one must guard against the ego of intellectual pleasure and the doubts that come with too much analysis. The ego may delude us. It is a form of temptation. By allowing us to become deluded with the satisfaction that comes from intellectualism, Krishna, Godhead, may also forbid us from realizing perfect theism through the intermediate stage.

Cross-purposes

Intellectualism and skepticism often work at cross-purposes from the practice of bhakti or divine love. Sometimes a beginner who comes in contact with the highest realized soul  or uttama-adhikara can clearly pass over the intermediate stage entirely simply through dedication. Such a fortunate soul has no need of arguments or philosophy.  So the intermediate stage is a dangerous zone: too much knowledge is a dangerous thing. And yet philosophical analysis and intellectual understanding can bolster faith, so study and self-reflection may sometimes be necessary, to consolidate faith.

Scriptural conclusions: siddhānta

Śrī Caitanya Mahāprabhu Himself has advised us to pay attention to the scriptural conclusions: siddhanta baliya chitte nā kara alasaiha ha-ite kṛṣṇe lage sudridha man­asa(Sri Chaitanya-charitamrita: CC Adi-lila, 2.117) “Do not be lazy in considering the philosophical conclusions of scriptural evidence (siddhanta) within your mind. Doing so firmly may help your faith and  attach your heart to Krishna.” So, is there a prohibition on reading books? No. We are not forbidden to read. The thing to remember is that while the intellect may support faith, philosophy may strengthen faith and make it easier to explain to others, faith alone can approach the infinite.

Analysis and the Infinite

Logical analysis, ratiocination, intellect can never approach the infinite. Only faith can give us entrance into the higher reality of transcendental love, the world of Bhagavan Śrī Kṛṣṇa.  In Sanskrit, faith is called śrāddha. Only  śrāddha can give us entrance. Only faith can help us. How much faith do we need? A tiny bit of faith can move mountains. We must come to realize that nothing is impossible in the infinite.  

Conclusions and Scriptural Evidence

Intellectual understanding is very useful. When we discuss the conclusions given through scriptural evidence, when we contemplate the positive thing, the treasure of divine love that has been given to us by our superior gurus, we must try our best to use our experience to understand its wholesome character. But trying to do this too much will disturb our faith. With too much study we may uncover discrepancies in the different versions. We may find difficulties in interpretations. We may lack the advanced hermeneutics necessary to see the world in the same way as the authors of the Upanishads. This may cause frustration. We may fail to understand the practical application of so much philosophy. The possibility for that is there. So, even while studying and trying to grasp the truths of the scriptures, tn the background we must always remember, “He is unknown, and His ways are unknowable. I cannot bring Him within my fist.”

Faith Alone

The intellect should not disregard the characteristic of Krishna that only faith shraddha can teach. The intellect should not encroach on Krishna’s divine jurisdiction. This will be dangerous to our faith. His sweet will should not be pushed. Krishna’s sweet will, His independence, should not be cornered. The intellect should not be indulged in that way. We must keep in mind that “He is all-in-all. He can make and mar.” This understanding will help us. Shraddha, faith, will help us! And faith is complemented by the good instruction of the divine master. Our guru can help us with understanding and faith. In Bhagavad-gita it is said, tad viddhi pranip­atena pari­prashnena sevaya(Srimad Bhagavad-gita: 4.34) “Learn divine knowledge through surrender, inquiry, and service.”

Guru and sincere inquiry

Pariprashna, sincere inquiry is allowed. Questions which help one’s faith may help us. So we may put this kind of question to our guru. We must seek conclusions which help our faith, corroborate our faith. On the other hand, impertinent questions are useless. The guru is not an encyclopedia. We shouldn’t trouble him with geography questions or trivial pursuits. I have seen devotees badger Śrīdhara Mahārāja with questions about the distance between the earth and the sun, the orbit of the moon, and whether Jesus Christ made pilgrimages to India. But the guru’s advice is meant to encourage faith and guide the disciple in his journey to surrender. These are the first principles or axiomatic truths that should begin our inquiry.

Cautions against overthinking

Śrīdhara Mahārāja says, “With that caution we shall try to know anything and everything, but we should understand that we are limited and we are going to tackle the unlimited. This idea must never be forgotten at any stage in our discussion.”




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