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Thursday, May 28, 2015

Los secretos de una familia






महाभरत
Mahābharata
As retold by
Michael Dolan, B.V. Mahāyogi

Mahābharata

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महाभरत
recontado por

Michael Dolan, B.V. Mahāyogi

y traducido en español por Teresa Loret de Mola, Tapanandini DD




Secretos de Familia

Bhiṣma continuó: Gandhari parió cien hijos a Dhritarasthra.


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Dhritarastra y Gandhari
“Cuando el envidioso Duryodhana nació empezó a llorar y a bramar tal cual un asno. Al escuchar este sonido, los burros salvajes, los lobos, los buitres, los chacales, y los cuervos empezaron a llenar el cielo con sus chillidos y gritos. 

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Vientos violentos soplaron y fuegos ardieron en los bosques.
Terremotos y tormentas de rayos anunciaron el nacimiento de quien destruiría al mundo. Chacales y tigres bramaron. Los profetas anunciaron el fin del mundo.


En el transcurso de un mes todo el resto de los cien hijos de Dhritarasthra y una hija, Dushala, nacieron. En secreto, Dhritarasthra engendró con otra mujer, Vaishya, un hijo más quien fue Yuyutsa el Bastardo.”

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Bhishma con Duryodhana

Bhiṣma hizo una pausa y sorbió un poco de agua.

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El Rey Yudhiṣthira se aproximó, “Has hablado, O abuelo de los Kurus, del misterioso origen de mi padre Paṇḍu. Cuéntanos sus hechos. ¿Cómo pasó el reino por sus manos? Y cuál es nuestro propio origen. ¿Cómo nosotros los Pāṇḍavas llegamos a Hastinapura?”
Moneda anciana de la dinastia de Panchala
El anciano sonrió, a pesar de estar atravesado por miles de flechas, su sangre real se escapaba hacia la tierra devastada. Un trueno atravesó los cielos y cayó una delicada lluvia que refrescó a todos.
“Mi querido Yudhiṣthira.” Dijo Bhiṣma. “Algunas de las historias que pertenecen a tu nacimiento y al de tus hermanos están cubiertas de misterios ignorados incluso por mí. Pero ahí anda la hermosa Kunti, hija de Kuntibhoya, rey de Panchala. Ella ha sufrido tanto por verte convertido en rey. Tú y tus hermanos se lo deben todo. Sólo ella posee la clave del enigma de su nacimiento. Muchas veces se ha dicho que ustedes cinco son más divinos que mortales. Si han de conocer su origen, han de acercarse a ella a preguntar. Pero ahora la tormenta va ganando mis poderes han de descansar. Otro día. Otro día, les contaré todo.”
Y Bhiṣma quedó en silencio.
De hecho, la tormenta espesó, y, con la narración del nacimiento de Duryodhana, Bhiṣma concluyó su relato. El sol descendió de nuevo en el cielo. Los Cinco Pāṇḍavas acamparon y se sentaron tranquilos alrededor del fuego.
Cuando las primeras estrellas salieron, Kunti apareció. Cuando los fuegos se hicieron mansos y miles de constelaciones se mostraron en el cielo, los demás hombres del campamento se sintieron agotados y fueron a descansar.
Llegó el momento de preguntar acerca del enigma que Bhiṣma mencionó. Y Yudhiṣthira y sus hermanos, le pidieron que continuara la narración acerca del origen de los Kurus.

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Kunti devi, segun artista de le epoca Victoriana
Kunti
 कुन्ती

Yudhithira le preguntó, “Nos has contado cómo Shakuntala se casó con Dushyant, del linaje de Bharata, y sus sucesores y cómo India fue gobernada en la paz y en la guerra. Y esta mañana escuchamos de Bhima el misterio del nacimiento de Duryodhana y el nacimiento de sus cien hermanos.

Cuando nos relató la historia, nos dijo que Gandhari, al sentir envidia de que tú hubieras concebido un hijo radiante como el sol, golpeó su vientre y que de ella surgió una bola de carne, dura como el cuero y el hierro, y que de esta bola surgieron los cien hijos de Dhritarasthra y el envidioso Duryodhana. ¿Es todo esto verdad?”

“Si, hijo mío. Tal como has dicho. El agonizante Bhima entonces ha revelado la historia del nacimiento de los cien hijos de Dhritarasthra y del celoso Duryodhana.”

Yudhithira, contemplando el campo de batalla vacío y de noche, preguntó entonces a su madre, “Pero ¿qué hay de nosotros? Algunos dicen que los Pāṇḍavas nacimos de los dioses. ¿Quién fue nuestro padre? Cuéntanos estos hechos. Hemos escuchado infinidad de cosas misteriosas que han dicho distintos sabios. Nadie cuenta la historia de los Pāṇḍavas. Preguntamos a nuestro abuelo, el gran Bhima, pero nos ha referido hacia ti.

“Oh madre, sabia, ¿es verdad que diste a luz a otro hijo, cuyo resplandor dorado iluminó el cielo nocturno igual que un segundo sol antes de que los Pāṇḍavas naciéramos en el bosque? ¿Cómo fue esto posible si aún no te habías casado con nuestro padre, el gran rey Paṇḍu?”

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Kunti respondió, “Oh hijo mío, oh gran Rey. No molestes a tu madre con tantas preguntas ociosas. Debes saber que incluso en las mejores familias hay secretos que nunca han de ser contados, y misterios que nunca han de ver la luz del día.”
Yudhithira dijo: “Oh madre, ayúdame a entender la causa de esta gran guerra, para que nunca repita los errores de mis antepasados. Revélame este secreto y lo honraré y guardaré. Prometo nunca revelar tu secreto, ni siquiera a mis hermanos.”

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Los 5 Pandavas con Draupadi, Bas Relieve, India

Kunti Devi, la más casta de todas las reinas de la historia de India, reveló el siguiente secreto al joven rey, para que conociera la verdadera historia de los Pandus y su rivalidad con los Kurus. Y así es que le contó su historia, dijo:

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“Te contaré todo, hijo mío. Pero no haz de juzgarme con demasiada dureza por las tonterías que hice siendo una niña. Cuando era una dulce niña, de apenas 14 años, vivía en el palacio de mi padre Kuntibhioa en las orillas del río Ganges donde los elefantes jugaban. Mi padre biológico era Surasena, pero Kuntibhoja era su pariente, su primo. Como Kuntibhoja no tenía hijos y me amaba, él me crió. Me dio la mejor educación en las sesenta y cuatro artes. Mi padre Surasena me entregó a él para que así fuera. Kuntibhoja me amaba como a su propia hija. Yo tenía mis propios aposentos y doncellas y un jardín hermoso con una gran higuera. Los pájaros Kokil (cuclillos) cantaban en la higuera cuando el sol se elevaba sobre el Ganges al traer cada nuevo día.”




Goal: 20,000 pageviews

At the bus terminal in Queretaro, Mexico


Dear Readers:

What a long, strange trip it's been. I'm coming up on 20,000 page-views. I never thought the blog would get this far.  I hope you're finding something of value in the re-telling of the Mahabharata. At this writing it would seem the blog has a dedicated readership determined to inspire me to continue.

I have readers in UK, USA, Russia, Ukraine, Ireland, France, Germany, China, India, Malaysia, Thailand, Cambodia, Vietnam, India, Mexico, Colombia, Venezuela, Argentina and Australia as well as other countries.

I started the blog in December of last year and am celebrating the six month anniversary of sorts.  I've just finished writing 365 blogposts.

 I thank you.

Your reading and comments are keeping me going. I'd like to specifically thank a few old souls who have given me inspiration to go on writing, especially B.B. Avadhut Maharaja who ordered me to try and do this, my old friend Bhakti Sudhir Goswami, who set me on this path of writing, the Russian devotees, Vijaya Raman, Prithu Das, Muralishwar, translator, poet, and friend,  Asutosh Krishna, whose kindness in translating me and tolerating me astonishes the mind, Ragalekha who helped me with the Henri Mouhout script before we went to Cambodia, all involved in the legendary trip to Angkor Wat, including Satya Sundar, Indulekha, Indubala, Ananta, the camera guys, Wilbur Force the Amerikanski, and all the great friends and amigos who helped us on the way; I'd like to thank Ananga Mohini, Bhakti Lalita, Priya Nana, the fulldome people, everyone in Thailand and  those of you who take the time to read or translate or share the blog, including the famous murkapujari, kshamadarascal, madhu, govinda vilasa, and those of you who have left comments, and I'd like to give a special thanks to my spanish language translator Teresa Loret de Mola, Tapanandini for graciously rendering Shakuntala and so many other episodes into Spanish.

Thanks once again to one and all. Please forgive my offenses or lack of attention if there's anyone whose name I overlooked.  God bless you all and hope to see you soon.

To the friends on facebook, sorry for inundating you all with my blog updates: it's the best way to publish my writing and get this out to the four corners of the world.  If you like what you read, please share it with your friends.

The humble and fallen, Michael Dolan/Mahayogi.

La venganza de una virgen...






महाभरत
Mahābharata
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Michael Dolan, B.V. Mahāyogi
Mahābharata

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महाभरत
recontado por

Michael Dolan, B.V. Mahāyogi



y traducido en español por Teresa Loret de Mola, Tapanandini DD

¡Muerte a Bhiṣma!
Amba Realiza Austeridades
Amba continuaba sin apaciguarse.

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Parashurama
Paraśurāma le dijo, “Oh gran doncella, con estos guerreros, brahmanes y dioses como testigo, fui tu campeón. Con lo mejor de mi  poder combatí para vengar el mal que te hicieron. Usé todos mis poderes militares y místicos contra mi estudiante Bhiṣma, y sin embargo no pude vencerle, nos acercamos a destruir el propio universo. ¿Qué más puedo hacer?”

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Amba respondió, “Bhiṣma tal vez no ha sido vencido en batalla, incluso por un gran campeón como su santidad. Mi única esperanza es apaciguando a Shiva. Entraré en la vida de yogui místico y por el poder del ascetismo, la renunciación y los sacrificios y austeridades alcanzaré la meta del yoga místico y adquiriré poderes necesarios para vengar los males causados por Bhiṣma.”

Amba se marchó hacia las montañas de Mahendra, en donde pasaría largos años dedicada a la austeridad y penitencia. Me despedí de mi antiguo preceptor, subí a mi carruaje de guerra y regresé a la ciudad de los elefantes de donde había venido. Con el paso del tiempo nombré a ciertos amigos para que llevaran a cabo la tarea de espiar a Amba para determinar sus movimientos.
Ella entró en una serie de ashrams y practicó austeridades por encima de los poderes de la resistencia humana, elevaba a través de Kundalini yoga la energía de su chakra a niveles sorprendentes. Sin comida, demacrada, seca, con el pelo enmarañado, vivió seis meses del aire y permaneció inmóvil.
Y entonces, tras abandonar el comer y el beber, pasó un año entero así parada en las aguas del río Yamuna. Amba seguía sin calmarse.

El Señor Shiva se Aparece a Amba
Ragini Bhairavi
Ofrenda a Shiva
El Señor Shiva, llevando su tridente y cabalgando un gran toro, apareció ante Amba. El Señor Shiva le preguntó. “¿Qué tendrás de mí?” Amba, contó su historia al Señor Shiva, le dijo, “Como mujer, ya no tengo ningún deseo, ni por el matrimonio, ni por hijos ni familia. Estoy, sin embargo, resuelta a convertirme en un hombre, a tomar las armas como guerrero y vengarme a mí misma de Bhiṣma.”
Por último Shiva le prometió, “Tú le matarás, pero no en esta vida. Te convertirás en un gran guerrero en tu próxima vida, pero primero haz de morir para vivir.

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Shiva montado en el toro Nandi
Debes construir un fuego y entrar en él. En tu próxima vida recordarás la pena que Bhiṣma te causó y nacerás como hombre. Habrás de nacer como el hijo de Draupada y convertirte en un Maharatha, amo del carruaje experto en el uso de armas mortales. Como guerrero el mundo te conocerá como Shikhandi, tú causarás la muerte de Bhisma.”

Amba Entra al Fuego
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Con estas palabras, Shiva desapareció de su presencia. Amba, alentada por su promesa, y determinada a llevar a cabo sus órdenes, construyó una pira funeraria en las orillas del río Yamuna. Prendió fuego a la madera, observó que se prendiera hasta que las flamas estuvieron elevadas y ardiendo. Calmada, con las venas llenas de heladas aguas de fría venganza, Amba entró en el corazón del fuego y las llamas se elevaron más y más hasta que la consumieron.
Mientras la ira se quemaba con el fuego, gritó sus últimas palabras como mujer, “¡Muerte a Bhiṣma!”