Visión Global del Bhāgavat
Los 10 Temas del Śrīmad-Bhāgavatam
Por Michael Dolan/ B.V, Mahāyogi
traducido por Teresa Loret de Mola/Tapanandini DD
El Bhāgavat es una literatura vasta y
arcana. No entregará sus secretos al lector casual. Los lectores casuales del Bhāgavat
caen en diferentes categorías. La mayoría de ellos brincan los primeros 9
Cantos de la obra y brincan de inmediato hacia el 10º Canto el cual describe a
detalle los pasatiempos y cualidades del Señor.
Dado que estas descripciones tienen encanto
y cualidades íntimas, el lector frecuentemente confundirá los pasatiempos de Śrī
Kṛṣṇa con historias de hadas entretenidas, útiles para tranquilizar a los niños
a la hora de dormir. Las damas en India reconocen la virtud de darles a sus
hijos una educación temprana y así exponen a sus hijos a las encantadoras
historias de Kṛṣṇa.
Desafortunadamente, esta aproximación tiene
el efecto negativo de convencer al público de que las historias de Kṛṣṇa son
solamente unos cuentos encantadores para niños. Los adultos deben superar los
cuentos de hadas de la infancia. Y entonces, las teorías impersonalitas de Buda
y Śaṅkara son tomadas con más seriedad que las fantasías salvajes promovidas en
el Bhāgavat. Dado que estos lectores superficiales han saltado encima de toda
la ontología y la reflexión filosófica contenida en los nueve Cantos previos de
la obra, está desconcertados por el 10º Canto y son incapaces de penetrar en
sus misterios.
Otros intentos sinceros de atravesar los
primeros 9 Cantos y quedan perplejos con su naturaleza esotérica. Los no
iniciados estarán confundidos y perdidos en el bosque de las referencias
mitológicas arcanas de los Puranas previos. Otros se obsesionaran con la minucia del Bhagavat y sus
descripciones del tiempo del átomo y de la cosmología del universo. Por esta
razón es indispensable seguir la guía de un experto en la materia del Bhāgavat,
Tal persona es también llamada Bhāgavat ya que encarna las enseñanzas del gran
libro trascendental.
Uno que intenta la aproximación a los
pasatiempos divinos en el 10º canto sin reflexionar acerca de la ontología de
la conciencia y los avatares de Dios esbozados en los otros cantos está
condenado al fracaso.
Según el análisis, el Bhāgavat despliega
sus argumentos en 18 mil veros en Sánscrito, pero se enfoca en 10 temas
importantes.
1.
sarga o la evolución subjetiva
primaria de la conciencia como fundamento de la existencia.
2.
visarga o los aspectos
secundarios de la evolución, como por ejemplo los orígenes de la materia y la
energía, el tiempo espacio continuo y la estructura del universo fenomenológico
3.
sthanam o la cosmología de la
realidad física y metafísica
4.
poshanam (la relación entre la
conciencia individual y la conciencia suprema y cómo las almas individuales a
fin de cuentas están bajo la protección de la Divinidad).
5.
utayah (los ímpetus kármicos
del ego y sus consecuencias, tanto en la causa como en el efecto),
6.
manvantara (las distintas eras
de la civilización humana y las antiguas dinastías de los reyes),
7.
isha-anukatha (la ontología de
la divinidad),
8.
nirodha ( lo temporal, la
naturaleza cíclica de la realidad universal tal como es vista en su disolución
última),
9.
mukti (liberación del ciclo
temporal del mundo de materia, tiempo, y espacio),
10. ashraya (La Personalidad de Dios original, Bhāgavān, como el refugio
supremo de todas las entidades vivientes).
Mientras que a lo largo de
18 mil versos el Bhāgavat se concentra en estos 10 temas importantes y entra
hacia un gran número de asuntos auxiliares, uno ha de mantener la mente en que
el propósito del Bhāgavat es Krishna-bhakti. En este contexto tal consideración
como la naturaleza material del universo y sus orígenes toma una importancia
secundaria. Estos temas se abordan en su contexto. La práctica espiritual sin
un respaldo filosófico frecuentemente no es más que fanatismo. Un sistema
filosófico bien considerado provee un marco apropiado para la práctica
espiritual. El Bhāgavat se concentra en estos asuntos para demostrar su dominio
sobre todas las variedades de reinos de la filosofía incluyendo la cosmología,
epistemología, ontología, ética y metafísica. El Bhāgavat es, por ello, no un
mero compendio de cuentos mitológicos fantásticos. Es una tesis teológica bien
considerada acerca de la divinidad. El Bhāgavat afirma que la divinidad es
personal. Promueve la dedicación a una divinidad monoteísta quien es reconocida
en sus páginas como Bhāgavān, Śrī Kṛṣṇa. Si hay otros avatares o personalidades
quienes derivan del Dios Supremo, Kṛṣṇa es la Suprema Personalidad de Dios.
Las visiones del Bhāgavat
son sutiles. El Bhāgavat no describe la creación como un acto singular creativo
de una deidad todopoderosa que crea el universo de la nada, ex nihilio y que
luego permite que las leyes de la física gobiernen todo. La creación no procede
del dedo de Dios, sino como un proceso evolutivo que envuelve a Su Mente
Universal. El durmiente Mahavisnu sueña el mundo, proyectando su mirada a
través de sus ojos medio cerrados hacia la realidad material potencial.
Evoluciona como una Gestalt de capullos anidados con diferentes capas de energía
consciente e inconsciente desarrollando sus propias capas de materia oscura,
energía oscura, ego sutil y la mente desde la energía sutil indiferenciada de
conciencia pura. Cómo la energía etérea del Brahmán no diferenciado se une a
los aspectos burdos del ego sutil y la mente, está reflejado en las páginas del
Bhāgavat mientras nos informa acerca de la estancia del alma en el mundo
material. Una evolución hacia atrás
desde lo sutil hacia lo burdo, la conciencia gira en el mundo del ego, el
intelecto y la mente, creando la fenomenología objetiva a partir de la
existencia subjetiva. Las enseñanzas del Bhagavat se reflecan en cómo toda la
existencia material al igual que el universo fenomenal se concretizan como una
hipnosis masiva. La visión de la divinidad como Mahavishnu refuerza la
experiencia cuántica de la inconciencia colectiva de infinitas jivas almas,
supervisadas por la percepción de Paramātmā o Súperalma.
Ya sea que estés de
acuerdo completamente con la tesis del Bhāgavat o que halles sus explicaciones
inadecuadas para enfrentar los desafíos de la ciencia moderna, primero debes
entrar a las sutilezas de su argumento. Y, si eres capaz de hacerlo, hallarás
un método maleable y flexible para, como lo pone Milton, “Justificar los
caminos de Dios al Hombre”. El Bhāgavat, por ello, responde a la divinidad
personal. La cristiandad moderna ha tomado prestadas estas ideas a través de la
teología del pensador alemán Rudolf Otto quien era un teólogo luterano y un
erudito en el estudio comparativo de las religiones.
Él sentía que a pesar del
hecho de que uno pueda hablar de funciones o niveles de conciencia, la propia
conciencia está más allá de la clasificación, irracional, “completamente
extraña”, “un otro completo”, no deducible, irreductible e inclasificable. Otto
estaba intricado por el misticismo que hallo en India como estudiante del
sánscrito y del Viṣṇu-bhakti de la escuela Śrī- Vaiṣṇava.
Otto estudió el sistema
del dualismo calificado promovido por Ramanuja, un gran estudiante del Bhāgavat.
Otto incluso llegó tan lejos como para traducir ciertos extractos del Bhāgavat
y del Visnú Purana al alemán. El libro de Otto, La Idea de lo Sagrado, es una
importante obra teológica, leída tanto por católicos como por protestantes. Desde
su publicación en 1917 ha seguido siendo popular como una respuesta sentida
poderosamente a la crítica de Kant. La Idea de lo Sagrado promueve la idea de
“sagrado” como el la llama “numinoso”.
En su intento por explicar la
experiencia mística auto-evidente, emplea un vocabulario filosófico especial.
El numinoso de Otto es una “experiencia no-racional, no-sensorial o sentimiento
cuyo objeto primario e inmediato se halla fuera del ser”. Su término deriva del
latín numen que significa “poder divino”. Curiosamente escoge un término con
ecos del noumenon de Kant, un término griego que se refiere a la realidad
incognoscible. Para Otto, el numinoso o “experiencia intuitiva mística divina”
se caracteriza por el temor y la reverencia. Basado en la visión del Bhakti del
Sur de India, este extraño maestro de filosofía alemán halla que una
experiencia de Dios se caracteriza por una sensación de misterio que él llama
mysterium, temor y reverencia o fascinación tremenda asombrosa todo al unísono.
Otto señala que el estado de conciencia de temor y reverencia que se alcanza a
través de la comunión místico con lo divino está más allá de la clasificación y
no puede entenderse racionalmente. Lo numinoso por lo tanto, , tal como el lo
llama no puede ser conocido.
Muchos teólogos del Siglo XX tales como Otto hicieron
lo posible para revivir el Cristianismo refiriéndose a los argumentos
esotéricos hallados en las tradiciones del Kṛṣṇa bhakti, puesto que las
tradiciones bhakti ofrecen los
argumentos más sólidos para la devoción monoteísta personal. Por supuesto, incluso
mientras obtenía ayuda de las escrituras indias muchos pensadores son
cuidadosos para ocultar sus huellas y oscurecer los orígenes de su pensamiento.
Simplemente no se justificaría el cristianismo con los argumentos del Bhagavat.
Los cristianos frecuentemente demonizan las creencias y tradiciones de India
llamándolas “paganas”. La fantástica mitología de miles de dioses es evidencia
de una sociedad atrasada, explican.
Qué curioso que esas tradiciones sabias de
India no sólo hayan resistido el ataque de cientos de años de actividad
misionera, sino que han sido absorbidas secretamente por el cristianismo como
bases de su doctrina por teólogos como Rudolph Otto.
El Bhāgavat no es una
colección heterogénea de mitos extraños: ofrece un marco metafísico para
entender las sutilezas del cosmos material.
Escrito media centura antes del nacimiento de Cristo, el gran orador Romano Cicerón comentaba, “¿Por qué
insisten que el universo no es una inteligencia consciente cuando da nacimiento
a la conciencia inteligente?” Podemos criticar al escritor o escritores del Bhāgavat
por no usar la ciencia más moderna en sus cálculos acerca del Universo. Pero
las grandes preguntas acerca de la conciencia y la realidad permanecen
inmutables desde tiempos de Cicerón. Los físicos modernos tales como Stephen
Hawking tal vez nos digan mucho acerca del tiempo-espacio continuum, pros
siguen careciendo de las herramientas para explicar cómo es espacio y el tiempo
anida dentro del capullo de la conciencia. Recientemente hemos descubierto que
casi el 90 % del Universo está compuesto de “materia oscura”. “La Materia
oscura” tal vez se convierta en un factor para nuestro entendimiento del
Universo. Y sin embargo sabemos tan poco acerca de la conciencia y su relación
con la realidad. Pero un entendimiento de la vida y la conciencia es
fundamental para el entendimiento del universo y nuestro sitio dentro del
cosmos. Tal como es imposible usar la geometría euclidiana para analizar el
universo cuántico, es imposible usar las herramientas de los físicos modernos
para investigar el reino metafísico. El Bhāgavat, sin embargo ofrece una visión
a este importante asunto ¿Por qué no leerlo?
No comments:
Post a Comment
Note: Only a member of this blog may post a comment.